La brújula, un medidor de ángulos
Como ya explicamos en una entrada anterior, la brújula nos ayuda a seguir un rumbo, entendido como el ángulo que forman "la línea que une el punto en el que estamos y el norte", con "la línea que une el punto en el que estamos y nuestro destino".En la siguiente secuencia de imágenes se muestra un ejemplo de localización de la dirección que lleva hacia el monte de San Vicente (Monforte) al fondo, con la brújula.
Buscando la dirección que marca el mojón con la brújula |
210º es el rumbo a seguir |
Desde el punto de vista matemático, el manejo de la brújula es el de un aparato de medida de ángulos que, al contrario de cómo solemos hacer habitualmente los matemáticos, están orientados en el sentido de las agujas del reloj.
Ejemplo de medida de un rumbo |
El primer paso debe ser localizar los dos lados del ángulo. Uno de ellos es siempre conocido, el que apunta hacia el norte, el otro lo da nuestra dirección de destino.
El proceso para medir el ángulo es el mismo que hacemos habitualmente en la materia de matemáticas, (con algunos matices, como el sentido), nos situamos sobre uno de los lados y buscamos el valor del giro respecto del otro lado.
La pregunta principal cuya respuesta queremos conocer es ¿Cuánto debemos girar desde el norte para obtener nuestra dirección de destino?
Si trabajamos sobre un mapa, para localizar uno de los lados podemos marcar una línea que una nuestro punto de partida y el de llegada y colocar la brújula sobre ella con la flecha de dirección apuntando en ese sentido. La brújula está girada con relación al norte un cierto ángulo ¿Cuál es su valor?
Girando la circunferencia graduada de la brújula (limbo) hasta que su valor 0 (N) coincida con el norte (obtenido, bien del mapa, o bien de la aguja imantada), obtenemos esta cantidad, que puede verse en el punto de la circunferencia que coincide con la flecha de dirección.
PASOS PARA MEDIR
- Colocar la brújula apuntando hacia la dirección de destino.
- Sin mover la brújula, girar la circunferencia graduada de la brújula (limbo) para situarla en la posición del norte, esto permite ver cuántos grados hemos girado, el valor lo indica la coincidencia de la circunferencia con la flecha de dirección.
LA BRÚJULA EN EL TERRENO
Antes de salir a caminar debemos conocer hacia dónde vamos. Si nuestra ruta es por el monte y no sabemos si está señalizada la brújula es nuestra guía.
El primer paso es localizar en el mapa el rumbo, siguiendo los pasos anteriores y después utilizar este ángulo como dirección de nuestros pasos cuando salgamos al exterior.
En el portal de senderismo https://thetrekkinglife.com/articulos/orientacion/160-uso-basico-de-la-brujula-tomar-una-referencia-en-el-mapa se puede ver con imágenes detalladas este proceso, también en estos vídeotutoriales del insituto catalán Cal-lípolis de Tarragona, en el que se puede cursar el ciclo formativo de grado medio Conducción de actividades físico-deportivas en el medionatural.
El último paso del vídeo anterior es el primero del siguiente, la preparación de la brújula para salir a caminar.
ANEXO
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